Hace aproximadamente un año, estábamos aquí discutiendo sobre vinos para sorprender en las navidades de crisis. A pesar de las expectativas del gobierno, la crisis continúa y, si cabe, las cosas van peor. Sin embargo, esto no significa necesariamente que debamos privarnos de brindar estas fiestas con un producto de calidad, sin necesidad de realizar un gran desembolso.
Este año hemos catado muchos vinos, de los cuales solo unos pocos han pasado por el blog. Algunos no mantuvieron una buena relación calidad-precio, otros no cumplieron nuestras expectativas, y algunos simplemente no tuvieron la oportunidad de ser comentados. Ahora, aprovechamos para presentarlos.
El primero que merece ser destacado es un verdadero hallazgo dentro de una gama de vinos que, por su precio medio, estaría fuera de esta iniciativa. Se trata de un champagne llamado Charles d’Embrun, disponible en la cadena Alcampo por tan solo 10 euros.
Este brut, resultado del coupage de pinot menuier, pinot noir y chardonnay, presenta un color amarillo-dorado con una burbuja fina y continua. En nariz, revela notas de higos frescos, corteza de naranja y toques de pastelería y mantequilla. En boca, es serio y equilibrado, con predominio de los cítricos sobre los matices de bollería, dejando un recuerdo notable. Es una opción perfecta para comenzar las cenas navideñas, especialmente con patés o salmón ahumado.
En cuanto a los blancos, el Finca La Colina Sauvignon Blanc, añada 2008, es una excelente opción para acompañar entrantes como el foie. Este vino ofrece una mayor opulencia en boca, acompañada de un toque de nervio que lo hace ideal para maridar con la grasa del pato. Su precio no debería superar los 10 euros.
Para los platos principales, como capones, aves rellenas o caza, recomiendo el Les Lezardes 2002 de René Rostaing, un vino tinto elaborado principalmente con syrah. Sus notas de arándanos, hierbas de monte y eucalipto en nariz se complementan con una estructura amplia, buena acidez y taninos suaves en boca. Su excelente relación calidad-precio lo convierte en una opción ideal por unos 11 euros.
Si preferimos cordero o lechazo, el Emilio Valerio 2005 es una elección apropiada. Este vino, elaborado bajo principios de agricultura biodinámica, ofrece una viva acidez y taninos «cuadrados» que armonizan perfectamente con las carnes potentes y grasas. Se puede encontrar por unos 12 euros.
Para acompañar el cochinillo, sugiero un albariño como el Veigas de Padriñán, disponible en La Fisna. Su frescura y acidez ayudan a contrarrestar la grasa del plato, ofreciendo una experiencia gastronómica equilibrada y deliciosa para estas fiestas.
