No voy a desvelar a estas alturas los placeres de disfrutar de una ginebra premium, tipo Citadelle o Junípero con una tónica gourmet como fever tree o q-tonic, y desde luego tampoco pretendo hacer ningún tipo de comparativa ante la que sin duda tendría todas las de perder, pero al igual que hay alternativas a Vega Sicilia o Chateau Petrus, también puede uno prepararse un Gin-tonic sabroso con medios más limitados.

Y es que el primer paso no reside tanto en la materia prima, como en tratar de evitar ciertos errores comunes.
El primero es el vaso. Por favor, olvídense del de tubo, desháganse de él o déjenlo para cuando les visiten sus cuñados (no los míos, que son muy majos). Lo ideal es una copa ancha (tipo borgoña) o una copa balón de cristal fino.
Después viene el hielo. Cuesta muy poco preparar unas buenas piedras con agua mineral, y la diferencia es más que importante. Utilicen un par de cubitos para refrescar la copa, moviéndola bien, para despues desecharlos e incorporar los definitivos, que deben ser abundantes. Sean generosos.
Sobre el acompañamiento frutal hay muchas teorías. Está el clásico de la corteza de limón, que nunca falla. Si el limón es bueno (limón galego!) lo prefiero a la lima. A mi me gusta rasparla un poco sobre la misma copa con unas pinzas de hielo, para expandir sus aromas. Después simplemente se deja caer en la copa.
Otra opción es una rodaja de pepino, únicamente recomendable cuando no se vaya a tomar más de un gin-tonic (empalaga bastante) y la ginebra no sea muy buena y aromática, puesto que la hortaliza pulveriza toda la exclusividad del destilado. No obstante, utilizado correctamente, el pepino da una bebida agradable, refrescante, aromática, algo más dulzona y grasa, pero muy llevadera para rematar una sobremesa y seguir disfrutando del día.
Con una buena ginebra yo recomiendo una discreta rodaja de manzana, tipo granny-smith, que nos dará las sutiles notas ácidas, perfectas para complementar la carga especiada de la premium. Eso sí, tengan cuidado porque se bebe sola. Además al terminar, comerse la rodaja es todo un festín de sensaciones.
Pero volviendo a los presupuestos de esta plataforma, nos vemos obligados a buscar una materia prima decente, pero algo más ajustada en precio. La candidata en destilado fue una ginebra catalana llamada Giró (menos de 10 € en el club del grumete), basada en una receta de 1860 que se ha ido perfecionando a lo largo de la historia de la casa. Es intensa y perfumada, y predomina el enebro sobre notas de cilantro y algo de jengibre. El final es muy seco y queda claro que pese a sus suaves 37,5º (la media anda en 40º), es un licor para combinar.
Y como la fever-tree, aparte de poco económica, creo que es la mejor tónica neutra – en el sentido de no excesivamente aromática – para exaltar una buena ginebra premium, tal vez en este caso sea recomendable una tónica algo más festiva, desenfadada y, sobre todo, barata. Y fíjese usted que huyendo de la omnipresente eschegüepes, que no es santo de mi devoción, topamos de nuevo con nuestro amigo Lidl y su tonic water básica (1€ el pack de seis) que es todo un hallazgo. Algo aromática, aunque sin excesos, y una boca discreta pero fresquísima. Perfecta para una ligera pero aromática y seca como esta.
Y me ha gustado mucho este tema, así que prometo volver con él. Sobre todo cuando le eche el guante a las Fentimans que me ha enviado el Sr. Louzán.
Continuará...
9 comentarios:
hasta ahora la que mas me ha gustado es una hendricks con suepes. tampoco he probado muchas pero a prori prefiero la rudeza de la suepes a la finura de la fever.
aunque eso tambien dependerá de la ginebra, del momento ect, seguiré probando.
Casualmente esa fue la combinación que me descubrió vida más allá de bombai. Quizás, como dices, no sea la fina fever la más apropiada, y Hendricks requiera una tónica más contundente. Yo te recomiendo esta que comento, aunque habría que probar también con la Fentimans...
Madre de mi vida, Mariano. Te juro que he acabado de leer tu post salivando.
Yo no soy mucho de gin-tonics, aunque de vez en cuando si que me gusta beber alguno. Tiempo ha si que bebía screwdrivers, y reconozco mi debilidad por Gordon's, calidades aparte.
Si vuelves a escribir un post que apetezca tanto, nos plantamos en tu casa y te hinchas a preparar combinados.
Saludos.
Excelente esa gin Giró,a mi personalmente me gusta mucho mas que la Citadelle, hay quien cría fama y hay quien carda lana, seca como la mojama, pero en cuestión de tónicas, prefiero la Scweppes por encima de todo. Felicidades por el post amigo.
Salut y GÜENA GIN¡¡¡¡
Smiorgan,
Todo es ponerse, hombre!
De todas formas, lo de la Gordons explica tu no asiduidad al gin-tonic, je je. No conozco la Screwdrivers, pero investigaré.
Da Vinci,
Todo un placer tener por aquí a un entendido en Ginebras, yo no soy más que un ignorante.
Lo de la suepes es más agotamiento que otra cosa, igual acabo volviendo...
Saludos
Mariano, en realidad me refería al combinado Screwdriver o destornillador (1/3 Gin + 2/3 zumo de naranja).
Veo que la Gordon's no entra en tus gustos, jeje.
Saludos.
Hola Mariano,
Ya conoces mi opinión sobre los gin tonics; el enfoque que le das es interesante. A mí me convences con lo de la manzana: es mi acompañamiento favorito (y también la calabaza).
La Fentimans... a ver tu opinión, pero es fanta de limón con precio de Pingus.
Un saludo,
prueba a cambiar la fruta por una pizca de pimienta negra molida -la echas entre la ginebra y la tónica-. quizá no sea algo para hacer siempre, pero de vez en cuando le da un toque. salud
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