En definitiva se trata de una forma rápida y resultona de llevar a cabo un convincente salmorejo tirando de despensa. Sólo necesitamos una lata de tomate entero pelado (si es extra, mejor, este Napal va especialmente bien), un diente de ajo, dos o tres rebanadas de pan de molde, vinagre de jerez y aceite de oliva virgen extra (lo más importante). Podemos quitar la raiz al ajo para que no repita.
Con las manos bien limpias (con lo de la Gripe A ya está todo el personal bastante concienciado al respecto*), remojamos las rebanadas de pan de molde en agua fría y las estrujamos ligeramente, seguidamente las metemos en el vaso de la batidora, al que incorporamos el contenido (no la lata) de tomate, sal al lgusto, el diente de ajo y chorrito al gusto de aceite y de vinagre.
Sólo queda batir bien y, si acaso, pasar por el chino por aquello del amargo de las semillitas del tomate. Yo no lo hice y quedó muy bien.
Invirtiendo más tiempo que en el propio salmorejo, podemos preparar unas virutas de jamón y ralladura de huevo cocido. Un chorrito de aceite de oliva y quedará de lo más ortodoxo.
Para acompañar, que mejor que una manzanilla de San Lúcar de Barrameda como esta Albamonte que embotella Bodegas Hidalgo (La Gitana) y que puede encontrarse en una conocida cadena de supermercados al increible precio de 3 euros. Tremendamente salina, larga, fresca y elegantísima. No sé si existe la posibilidad de mejorar tal relación calidad-precio con ningún vino. Todo un descubrimiento y perfecta para soportar la potencia del vinagre y la acidez del tomate.
Para acompañar, que mejor que una manzanilla de San Lúcar de Barrameda como esta Albamonte que embotella Bodegas Hidalgo (La Gitana) y que puede encontrarse en una conocida cadena de supermercados al increible precio de 3 euros. Tremendamente salina, larga, fresca y elegantísima. No sé si existe la posibilidad de mejorar tal relación calidad-precio con ningún vino. Todo un descubrimiento y perfecta para soportar la potencia del vinagre y la acidez del tomate.
Para quien no le guste la manzanilla, recomiendo una cerveza bien tirada, pues entre el ajo, el vinagre y el tomate se meriendan cualquier vino blanco, tinto o rosado que le echen.
* Según los expertos, y por si a alguien le interesa, un buen lavado de manos con abundante jabón deberá durar el tiempo equivalente a cantar dos veces cumpleaños feliz.
4 comentarios:
Que cosa mas facil oye! y que buena pinta igual lo hago esta tarde y todo, con eso de que el verano siguen instalado en Galicia....
Respecto al vino... ya lo probare un dia y me cuentas que de manzanillas no sé na! aunque ahora que voy a trabajar en Domecq...jajajja
eres un impostor, jejejeje. Pero que resultona la solución
Pedro. Tirao!, y casi no mancha nada.
De manzanillas ya hablaremos... y si los de domecq se hubiesen quedado en Jerez. La pena es que a base de vender únicamente manzanillas es dificil sobrevivir...
Jorge, no siempre tenemos dos horas para cocinar, pero a veces se puede hacer que lo parezca, je je...
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